viernes, 5 de julio de 2013

Ciudad

La ciudad
nos aísla de todos
recubriéndonos con personas.

Y cuando
queremos cubrirnos de lluvia
pasan miles de paraguas
(recubriéndonos con personas)

Entre estos infinitos urbanos
recubiertos de personas
a veces, solo (a veces)
vemos algo;
una máquina del tiempo

Algunos lo ignoran
a otros les asusta
pero yo digo (a veces):

“se llaman sonrisas”. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario